Llegarán las reliquias de San Judas Tadeo a México y Texcoco


Será sede Texcoco el lunes 19 en Catedral pasando después a la Iglesia de San Pedro y por la tarde noche a Jolalpan y 20 de agosto a Chimalhuacán



Religión
Julio 28, 2024 18:06 hrs.
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Roberto Antonio Huerta Paniagua / › Divergencias Informativa

Seminario de Cultura Mexicana
Corresponsalía Texcoco, Estado de México

Se ha publicado en varios periódicos electrónicos nacionales que el 29 de julio llegará (tal vez ya llegó) al puerto de Veracruz, primera vez, una reliquia de San Judas Tadeo. Esta reliquia es un fragmento de hueso del brazo del apóstol; y proviene de la Basílica de Salvatore in Lauro, en Roma, Italia. Además, que dicha reliquia será llevada a 70 ciudades de nuestro país, después de una solemne misa en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México.

Las reliquias, en la religión católica, son objetos venerados por su asociación divida o sagrada, particularmente son huesos u otros restos de santos. Su culto se remonta a las atapas primitivas del cristianismo; y se veneran también en otras religiones, empero, los protestantes proscriben terminantemente todo culto de éstas.

No se discutirá aquí la validez, origen y autenticidad de esta reliquia. Es cuestión de fe, y ésta es muy respetable. Sin embargo, sí es válido comentar, opinar e incluso comparar alrededor del hecho. Y es que a quí en México, como en otros muchos países, los restos de santos y santas, de héroes y heroínas e incluso de gente común, son objeto de respeto y hasta de veneración.

En lo histórico-político, hay restos humanos que esa historia oficial ha elevado casi a la categoría de intocable, inamovible e indubitable ’santidad’; así que, no se puede ni se debe dudar de su autenticidad porque si así fuere se pondría en duda dicha historia, así como el discurso demagógico, el nacionalismo enfermizo, los héroes fabricados y demás.

Uno de los casos sobresalientes de ’reliquias’ patrias son los huesos de Cuauhtémoc, ’encontrados’ por la antropóloga Eulalia Guzmán debajo del altar mayor de la Iglesia de Santa María de la Asunción en Ixcateopan, Guerrero, el 26 de septiembre de 1949.

Lamentablemente para esa historia oficial y para los fanáticos que insistentemente creen que son los huesos de ese tlatoani, estudios serios arrojan que esos restos son fragmentos de hueso pertenecen a ocho individuos, provenientes de diferentes periodos históricos y muestran métodos distintos de enterramiento; el cráneo en lo particular pertenece a una mujer mestiza adulta y no pudo haber sido sepultado en 1529. Así que, no hay ninguna base científica para sustentar la afirmación de que los restos encontrados allí sean los de Cuauhtémoc. Además, se sabe ya que, con el fin de promover el nacionalismo y la identidad nacional, la arqueóloga Eulalia Guzmán fue presionada por autoridades del Gobierno Federal para que afirmara que esos huesos eran los de Cuauhtémoc.

Está e caso también de la cabeza de Doroteo Arango (Pancho Villa), que nadie sabe quién se la cortó, a dónde se la llevaron y con qué finalidad. Se perdió. Y bueno, están los restos de los ’niños héroes’ y de otros tantos héroes y heroínas más.

Pasan los años y el 14 de enero de 2013, en el periódico La Jornada, refiriéndose a los huesos patrios (los de los héroes que están o estaban en el Ángel de la Independencia), se reporta que hay una revoltura de esqueletos y que surgen dudas sobre su autenticidad. Se anotó en ese diario que en las urnas reposas también mujeres, hombres, niños e incluso venados; que esas osamentas fueron ’paseadas’ en los ostentosos desfiles del bicentenario organizados por la presidencia de la República encabezada por Felipe de Jesús Calderón Hinojosa; y la información al respecto estuvo reservada por el Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI) durante dos años.

Y en este sexenio, Andrés Manuel López Obrador, pues no podía quedarse atrás. Envió a 80 militares en comisión nacional de búsqueda a Panamá, precisamente, para buscar, localizar y repatriar los restos (huesos) de Catarino Erasmo Garza Rodríguez, un general o periodista que 18 años antes de iniciar la Revolución Mexicana buscó derrocar al general Porfirio Díaz Mori; y que él menciona en un libro. Las últimas noticias dicen que se están haciendo estudios para validar si estos restos son realmente de este personaje. A ver con qué cosa le salen al pueblo sabio.

Ahora, en lo religioso, igual ha pasado, en algunos casos ya se ha demostrado que ciertas reliquias no pertenecieron a personas o que no fueron del santo al que se le atribuían. Y bueno, para no entrar en discusiones y que ofenda involuntariamente por cuestión de la religiosidad de los lectores, me limitaré a recomendar la lectura del libro Cristianismo primitivo y Paideia griega, de Werner Jaeger, editado por el Fondo de Cultura Económica, colección Breviarios, No. 182. Que cada quien saque sus conclusiones.

Todo lo anterior me ha llevado al mundo de los recuerdos, y allí me acordé de Orberosa. ¿Quién fue Orberosa?...

Allá, muy lejos, en el espacio y en el tiempo, en una isla, San Mael bautizó por equivocación a unos pingüinos y la que se armó en el Cielo. No hubo más remedio que darles alma y hacerlos más o menos humanos.

Los pingüinos, en el proceso de hacerse hombres (porque ya tenían alma al ser bautizados), empezaban a perder el plumón y andaban desnudos sin pudor alguno y de la forma más natural, pero el santo Mael decidió vestirlos, para lo cual un séquito de monjes empezó a traerles ropas; pero un monje de nombre Magis le sugirió al santo que no los vistiera, que los dejara desnudos porque vestidas las hembras despertarían la lujuria. Y para demostrarlo, el monje capturó a una pingüina que no era hermosa ni fea y nadie la miraba. La empezó a vestir con ropas ajustadas que realzaban sus formas; Además, la adornó con joyas. La pingüina primero se resistió, pero luego le agradó el atuendo. La pingüina ya ataviada siguió su camino y los pingüinos volteaban a verla y a seguirla. Y Magis exclamó: Fue necesario que dejasen de ver claramente con los ojos y les obligáramos a representársela en la imaginación… Yo mismo me siento ya irresistiblemente atraída hacia la pingüina… Entonces se recogió los hábitos y se abalanzó sobre la pingüina, a la cual oprimió entre los brazos y la condujo a una gruta en donde la poseyó. Los pingüinos se entristecieron y San Mael comprendió que el diablo, bajo la figura del monje Magis, le había ceñido el traje a la hija de Alca

Pero las cosas no terminaron ahí, pasó algún tiempo y Kraken, un pingüino de brazos robustos y buen ingenio, se encontró por azar a una joven pingüina muy graciosa, era la misma que antes el monje Magis había engalanado y la primera que lució los velos púdicos y que por ello recibió el nombre de Orberosa. Los pingüinos creían a Kraken muerto, pero en realidad se había refugiado en la playa de las Sombras y ahí se llevó a Orberosa.

En ese entonces los pingüinos vivían tranquilamente, pero empezó a correrse el rumor de que un dragón había devastado dos cortijos en la bahía de los Somormujos. Poco antes, había desaparecido la virgen Orberosa. Al principio a nadie le preocupó, pues varias veces había sido raptada por hombres violentos y enamorados y otras veces iba en busca de raptores, cosa que a nadie sorprendía por ser la virgen Orberosa, pero aquella vez, como pasaba el tiempo y no volvía, creyosela devorada por el dragón.

Una noche, el dragón devoró seis gallinas, un cordero y a un huerfanito llamado Elo. El pueblo entonces se congregó para especular acerca de la forma del dragón y qué hacer para librarse de él. No llegaron a ningún acuerdo ni en la forma de la bestia ni en qué hacer para librarse de sus correrías. Poco después, el dragón se robó cincuenta carneros, doce cerdos y tres niños; y para enjugar aquella calamidad, los ancianos resolvieron reunirse y acudir al bienaventurado Mael para que les aconsejara. Los ancianos se quejaron: Ha sacrificado al niño Elo y siete más, ha despedazado con su afilada dentadura a la virgen Orberosa, la más bella pingüina… Y Mael les dijo que los dragones eran comunes entre los paganos y que a pesar de haber sido los pingüinos bautizados alguno adorase ídolos o practicara algún otro rito, por lo que les aconsejaba descubrir todo rastro de idolatría y extirparla y que también eran eficaces el rezo y la penitencia. Así las cosas, un anciano que adivinaba el porvenir sacudiendo una espiga de cebada sobre un cedazo, fue arrojado a un pozo.

Entre tanto, Orberosa, aunque amaba a su esposo admitía otros amores; mientras Kraken salía por las noches a asolar los poblados, ella, frecuentaba a un pastor de nombre Marcelo, cuyo cuerpo era la envoltura de una infatigable virilidad. La bella Orberosa compartía satisfecha el lecho aromático del pastor; y lejos de darse a conocer se presentaba con el nombre de Brígida, hija de un jardinero de los Somormujos. Kraken, ignoraba los amores de Orberosa porque era un héroe y los héroes no penetran los secretos de sus mujeres.

Una vez en el crepúsculo, Orberosa vio pasar a un boyero jorobado de nombre Belmont; y un día, mientras suspiraba de amor entre los brazos de ese boyero en un desván, escuchó a un novicio que solicitaba los servicios de una virgen muy pura y en absoluto intacta para salir al encuentro del dragón, le ciñera en el cuello el cordón de su cintura y lo condujera dócilmente como si fuera un perrito. Pero pasaba el tiempo y ni una virgen se presentaba; entretanto, los habitantes de Alca se envalentonaban y una noche un grupo numeroso de labradores sorprendieron al dragón y armados lo persiguieron. Uno de los labriegos afirmaba haberlo pinchado con su horquilla, pero por desgracia cayó en una charca y el dragón pudo huir.

Esa noche, Kraken llegó a su caverna más tarde que de costumbre, se quitó el casco de piel de foca rematado por dos cuernos de buey, visera con garfios y una quijada d jabalí; arrojó los guantes con garras y uñas de picos de gaviotas y se desabrochó el cinturón que se prolongaba en una cola verde con pliegues; luego le ordenó a Elo que le quitase las botas. Y murmuró: ¡Malditos pingüinos! Va siendo un oficio muy perro el de dragón. Ya no me temen. Antes huían cuando me acercaba… Ahora esos rústicos ya saben defenderse… Hace poco… perseguido… me vi obligado a tirar los conejos y las gallinas que llevaba y a recoger mi cola… para huir con libertad… apenas pude escapar a un bruto que me hundió la punta de su horquilla en la nalga… ¡Qué idiotas son los pingüinos! …Ya estoy harto de arrojar llamas a las narices de tantos imbéciles. ¿Me oyes, Orberosa?

Entonces la bella Orberosa le dijo a Kraken que le permitiera un artificio para salvar su gloria y sus bienes y que no depreciara el auxilio de una mujer. Así, lo enteró de que unos monjes recorrían los poblados diciendo que la bestia sería vencida por una virgen muy pura si la doncella envolvía el cordón de su cintura al cuello del dragón. Kraken le preguntó que cómo se había enterado, y Orberosa le dijo que no interrumpiera reflexiones graves con preguntas frívolas y continuó: Pienso ir en busca del anciano Mael y decirle: Soy la doncella destinada por el Cielo para humillar al dragón. Luego le expuso el plan. Al día siguiente le enseñaron a Elo y a los otros muchachos a introducirse en el traje de la bestia y hacerla avanzar a la vez que tocabar una trompeta y quemaran estopa para que salieran rugidos y llamas de las fauces del dragón.

Orberosa, según el plan, se presentó ante el santo Mael quien le preguntó que quién era y ella contestó: La virgen Orberosa. Mael se sorprendió porque esa virgen había sido devorada por el dragón. Entonces Mael le dijo: ¿Acaso, hija mía, en las entrañas de la bestia supiste armarte con el signo de la cruz para defenderte y salir intacta?... y Orberosa respondió: No te equivocas padre mío… En cuanto salí… busqué refugio en una ermita de la playa de las Sombras. Vivía en la soledad, consagrada al rezo y a la meditación entre austeridades inauditas, cuando una voz del Cielo me hizo saber que sólo una virgen puede humillar al dragón, y que yo era la virgen predestinada. Y además le dijo que juntara a los pingüinos y les dijera: …Mañana, al salir el sol… sobre la colina, frente al erial desolado que se extiende hasta la playa de las Sombras, y procurarás que ningún pingüino se acerque a más de quinientos pasos… Y San Mael le preguntó: ¿No querrás que te acompañe un hombre valiente y piadoso para que sea él quien mate al dragón? Orberosa le respondió: Tú lo has dicho, venerable anciano; entregaré el monstruo a Kraken, el cual le degollará con espada resplandeciente. Has de saber que el noble Kraken, a quien han creído muerto, reaparecerá de nuevo entre los pingüinos para matar al dragón, y del vientre de la bestia saldrán los niños que fueron devorados. Y continuó: …y también por aviso del Cielo supe que para corresponder al beneficio que recibe del caballero Kraken, el pueblo pingüino le pagará un tributo anual de trescientos pollos, doce corderos, dos bueyes, tres cerdos y cincuenta sacos de trigo. Además, los niños que salgan del vientre de la bestia serán entregados al caballero Kraken para servirle y obedecerle… Si el pueblo pingüino dejase de satisfacer su tributo, se presentaría en la isla otro dragón más terrible que el primero.

Al día siguiente, frente a una muchedumbre de pingüinos convocados por Mael y cuando aún reinaba la oscuridad, se oyó un rugido y se asomó una figura vaga entre las rocas, era el dragó. Orberosa lo ató con su cinta y lo condujo; apareció entonces el héroe y se abalanzó sobre la bestia, la derribó y le abrió el vientre con la espada, y salieron los niños con las manos cruzadas que se postraron a los pies de la virgen, quien les dijo: Recorreréis los poblados y diréis: ’Somos las pobres criaturas devoradas por el dragón, y salimos en camisa de su vientre’. Los habitantes os darán con abundancia todo lo que podáis desear. Pero si habláis de otro modo, sólo recibiréis pescozones y bofetadas. ¡Andad!

Y Kraken afirmó: Ahora que ha muerto el monstruo, el dragón soy yo. Y Orberosa encadenó por largo tiempo con sus brazos generosos a boyeros y pastores, y cuando ya no era agradable ni joven, se consagró al Señor. Fue objeto de veneración y después de muerta fue admitida en el canon de los santos y declarada la celestial patrona de la Pingüinia. Kraken dejó un hijo que heredó la cresta del dragón, por lo que se le llamó Draco y fundó la primera dinastía de los pingüinos.

El cuerpo de Orberosa fue enterrado en una gruta en la playa de las Sombras. Los primeros peregrinos que la visitaron fueron mozos y mozas que en parejas iban por las noches y le dedicaba a la santa un culto fervoroso y discreto que luego en la intimidad las mozas recordaban. Pronto el misterio de la gruta se extendió a otros pueblos y unos monjes se instalaron en la gruta, construyeron un monasterio, una capilla y una hospedería y comenzaron a afluir peregrinos. Pero en el reinado de Collica y de sus sucesores, la tumba de Orberosa fue despojada de sus riquezas, el monasterio fue incendiado y los monjes dispersados.

Cien años después, el monasterio fue reconstruido y los peregrinos llegaban en abundancia. Los milagros se multiplicaban: curaba cojera, hidropesía, parálisis, baile de san Vito y los monjes guardianes de la tumba gozaban de una envidiable opulencia. Entonces, en el año 900, la santa se le apareció al rey Draco el Grande y le ordenó que la reconociera como patrona celestial y la trasladara a la catedral de Alca. Las reliquias de la virgen se trasladaron con gran pompa y se depositaron en una urna de oro con esmaltes y piedras preciosas. Luego, bajo el reinado de Bosco IX, la flota marsuína sitio el puerto de Alca y el obispo, el cabildo, los magistrados y demás, sacaron de la catedral la urna con las reliquias de Santa Orberosa y la pasearon por toda la ciudad seguidos del pueblo. Pero fue inútil, los marsuínos atacaron Alca por mar y tierra y durante tres días y tres noches mataron, robaron, violaron e incendiaron la ciudad.

Siglos después, Princeteau, en sus ’Antigüedades de Alca’, escribía: Nada tan incierto como la historia y hasta la existencia de Santa Orberosa. Un viejo tratadista anónimo… refiere que una mujer llamada Orberosa fue gozada por el diablo en una caverna, donde las mozas del pueblo jugaban a… Añade que aquella mujer fue concubina de un… dragón… La historia de Orberosa… no es más digna de fe. La primera vida de esta santa la escribió el abate Simplicissimo trescientos años después de los supuestos sucesos…

Y un día, la urna con las reliquias de Orberosa (depositadas desde hace cinco siglos en la iglesia de San Mael) fue trasladada a la casa de la Villa y sometida a estudio. Era de cobre dorado en forma de arquilla, cubierta de esmalte y adornada con piedras falsas. El cabildo había quitado los rubíes, los zafiros, las esmeraldas y las bolas de cristal de roca y había puesto en su lugar vidrios tallados y en su interior había un poco de polvo y ropaje, que fueron arrojados a una hoguera encendida en una plaza. El pueblo, danzaba en torno y cantaba himnos patrióticos.

Desde una puerta, Rouquín y Rouquina veían aquel círculo. Rouquín esquilaba perros y castraba gatos y frecuentaba tabernas; Rouquina era buscona y alcahueta. Ella, le comentaba a Rouquín que cometían un sacrilegio y que se iban a arrepentir de lo que hacían, que llegará un tiempo… en que los pingüinos honrarán nuevamente a su bendita patrona. Oye Rouquín, sería conveniente guardar para entonces en vuestra vivienda, dentro de un puchero, un poco de ceniza, huesos y guiñapos. Diremos que son reliquias de Santa Orberosa y que las salvamos de las llamas con peligro de nuestra vida. Mucho me equivoco si no ha de producir honra y provecho. Esta… acción podrá servirnos en la vejez para que nos conceda el señor cura la venta de cirios y el alquiler de reclinatorios en la capilla de Santa Orberosa. Y aquella misma noche, Rouquina retiró de su hogar un poco de ceniza y algunos huesos roídos; los metió en un puchero y los guardó en un armario.

Pasaron muchos años y algunos santos se olvidaros; pero finalmente el padre Douillard logró restablecer a Santa Orberosa. Y según la ’Historia de los milagros de la patrona de Alca’, del abate Plantain: La vieja urna fue destruida durante el Terror para fundir su metal y vender las piedras, y los preciosos restos de la santa fueron arrojados a una hoguera; pero una pobre mujer muy piadosa llamada Rouquín, recogió durante la noche, y con peligro de su vida, los huesos calcinados y las cenizas de la bienaventurada, los conservó en un tarro de dulce, y al ser restablecidos el culto, los entregó al venerable párroco de San Mael. La señora Rouquín acabó piadosamente sus días dedicada a vender cera y alquilar sillas en la capilla de la santa.

Los nuevos teólogos, aceptaron como verídica la leyenda del venerable Simplicissimo, y admitían que una vez el demonio, con hábito de fraile, se llevó violentamente a la virgen para gozarla en una caverna; pero la virgen supo resistir las tentaciones y astucias del Maligno y quedó triunfante la virtud. Además, sobre la séptima prueba, cuando santa Orberosa fue tentada por el dragón, salió a combatirlo y logró vencerlo con su pureza.

Así fue lo de Orberosa. Que cada quien, en su libre albedrío, piense. Y si algún lector desea conocer el último milagro de esta santa, lea por favor La Isla de los Pingüinos, de Anatole France, escritor francés de finísimo humor más que negro.

FUENTES DE INFORMACIÓN

Animal Político. 2023. AMLO enviará militares y CNB a Panamá para buscar restos de revolucionario protagonista de uno de sus libros. Animal Político. Redacción. Disponible en: https://animalpolitico.com/politica/amlo-enviara-militares-cnb-buscar-restos-catarino-erasmo-libro
Cruz, J. 2024. Traerán a Veracruz las reliquias de San Judas Tadeo. Xeu Noticias. Disponible en: https://xeu.mx/veracruz/1333525/traeran-a-veracruz-las-reliquias-de-san-judas-tadeo
Diario Los Tuxtlas. 2024. Traerán a Veracruz las reliquias de San Judas Tadeo. Diario Los Tuxtlas. La voz ciudadana. Disponible en: https://diariolostuxtlas.com/2024/07/26/traeran-a-veracruz-las-reliquias-de-san-judas-tadeo/
El Momento. 2024. Reliquias de San Judas Tadeo visitarán Veracruz por primera vez. El Momento. Diario tu alcance Veracruz. Disponible en: https://elmomentoveracruz.mx/2024/07/26/reliquias-de-san-judas-tadeo-visitaran-veracruz-por-primera-vez/
Huerta P., E.A. 2013. Los huesos de Orberosa y las reliquias patrias; o las reliquias de Orberosa y los huesos patrios. Impresión electrónica. Consejo de la Crónica Municipal de Texcoco. Texcoco, México. 5 p.
Villa y C., P. y A. Morales. 2024. 2024. Ya fueron localizados y repatriados de Panamá los restos del general Catarino Erasmo Garza: AMLO. El Universal. Disponible en: https://www.eluniversal.com.mx/nacion/ya-fueron-localizados-y-repatriados-de-panama-los-restos-del-general-catarino-erasmo-garza-amlo/

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