¿El adicto nace o se hace?


De adicto a ADICTO

Salud
Abril 07, 2020 18:39 hrs.
Salud ›
Ernesto Salayandía García › Divergencias Informativa

Levante la mano, quien conozca a una persona que consuma dos o más caguamas al día

Doy un promedio de dos pláticas por semanas en escuelas de educación preescolar, con, alumnos y padres, igual, en primarias, secundarias y bachillerato, recorro la ciudad de Chihuahua, Chihuahua México, donde vivo, de salón en salón, de grupo en grupo, por las mañanas, regalo la historia de mi vida a más de 300 niños, por las tardes, hago el mayor de mis esfuerzos y voy a una junta con padres de familia, a lo mucho, van cinco, no obstante hago mi servicio social y les doy mi testimonio, la historia de mi vida.

Cada evento, genera en mí, un gran aprendizaje, los niños, con su inocencia, su sangre fresca, lo genuino y la honestidad en ellos, me enseña un mundo de cosas, me doy cuenta que los temas de alcoholismo, drogadicción, violencia doméstica, hostigamiento escolar, desintegración familiar, mala comunicación, conductas toxicas, entre padres e hijos, neurosis, depresión, son temas comunes, por demás conocidos y cuando entro en calor, les comienzo a preguntar.- Levante la mano…

Quien conozca a una persona que consumo de una caguama a dos al día? cuando la levantan por el consumo de cerveza, es casi general, como cuando les pregunto.- Levante la mano quien pase ocho horas prendido de un aparato electrónico.- Son mayoría los que levantan la mano. La cerveza es una droga, y la adicción a los celulares, es peligrosa.- Levante la mano, quien en su casa se escuchen todo el día, gritos e insultos.- Son pocas las manos que no se levantan.-

Hablando de mí, les muestro el futuro en la bola de cristal

Un drogadicto en casa, primero se intoxica a manera de juego, fumando marihuana, tomando cerveza, consumiendo pastillas, inhalando sustancias tóxicas y poderosas, comienza poco a poco a entrar al pantano, a ese callejón sin salida, que son las adicciones, a la cruda y triste realidad de la enfermedad emocional, y las consecuencias no se dejan esperar, por principios de cuenta, abandona la escuela, claudica y erradica su presente y su futuro, ya no cabe en ese círculo, ya no es lo mismo, o lo corren por ingobernable o bien, el mismo toma la decisión de cancelar su proyecto escolar y deportivo, se convierte en un parásito social, en un mediocre, perezoso, enano, sin ganas de nada, todo el día duerme y de noche anda de vago, él, este drogadicto, se convierte en un gran maestro, porque comienza a enseñar el infierno que es vivir cuando alguien tiene la compulsión de las drogas, cambian, en ese hogar los horarios, el lenguaje, el estilo de vida, la comunicación, se llena, esta casa de neurosis, incertidumbre, miedos, dolor, frustración, tristeza y el drogadicto cada vez se hunde más y más, de una sustancia se va a otra, se junta con jóvenes malvivientes, buenos para nada, nacidos para perder, igual que ellos y es realmente una vergüenza familiar, un dolor profundo, una herida grave en el alma y el tiempo transcurre de mal en peor y ese joven, muere antes de cumplir 25 años, muere su carrera académica, muere en dignidad, como también mueren sus ilusiones y sus sueños, hay quienes mueren asesinados o en accidentes, otros mueren en su libertad y reciben sentencias largas como resultado de sus actos y esta es la verdad, no hay drogadicto que no se escape, que no sea mediocre.

La parte del papá
Algunos padres dan la espalda a sus hijos, y como consecuencia, embarazan a las mujeres, casados o no, después son irresponsables y jamás vuelven a ver a sus hijos, otros, son un pésimo ejemplo, borrachos, todos los días consumen cerveza, son mala copa, drogadictos, mujeriegos, generadores de violencia doméstica, son poco hombres, porque se lavan las manos y estos niños, productos de los hogares disfuncionales son los candidatos más sólidos para caer en las garras de las adicciones, padres de todos los estratos sociales, sin distinción, incluso, indígenas o menonitas, son igual de dañinos para los niños y en otro orden de ideas, hay padres y padrastros que dan un pésimo ejemplo en sus patrones de conductas, son esos típicos machos mexicanos, buenos para nada, cobardes, mal nacidos que sentencian a sus hijos al fracaso y a que se hundan en el infierno de las drogas y la delincuencia, son estos padres, en infinidad de casos, los culpables de la drogadicción infantil y no hay una ley que los someta, es muy fácil embarazar a una mujer, es muy fácil tener hijos y es muy fácil abandonarlos en todos los sentidos y ahí están las consecuencias, de este México en decadencia, ahí está el rio de sangre, el mar de injusticias y de incongruencias.

La parte de la mamá
No sé cuál sea el afán, de muchas mujeres jóvenes que salieron embarazadas después de una noche de copas, de un acostón, tuvieron al hijo, el causante, tal vez, en la bola ni se supo, después de que la inocente criatura, cumple su primer año, la historia se repite, estúpidamente, la muchachita se vuelve a embarazar de otro hombre y en otras circunstancias, después, pasa otro año y se va de novia de otro macho, la embaraza y ya son tres hijos, de chile, de dulce y de manteca, de los tres, ninguno la apoya en ningún sentido, esta mujer, pide ayuda a la abuela y a la bisabuela, estas mujeres con el espíritu materno que las caracteriza, se hacen cargo, a su capacidad, cultura y preparación de las criaturas, estos niños, crecen rebeldes, ingobernables, neuróticos, irreverentes y hay que recordar un dicho, que dice y dice bien.- Niños pequeños, pequeños problemas.- Niños grandes, grandes problemas.- y mientras la mamá de las crías, anda del tingo al tango, sacándole hilo a la hilacha, en brazos de uno y de otro, de cama en cama y cuando sus hijos llegan al infierno, a La Saliva del Diablo, andan buscando ayuda para internar a su niño en un centro de rehabilitación, como si esa fuera la solución, el niño, se mantiene limpio por tres meses en que dura el tratamiento, pero después, a los tres días de haber salido, o el mismo día, se revienta, con nuevas recetas y recae, luego lo internan y así es la historia, hay drogadictos, jóvenes que se están haciendo viejos con más de 20 procesos y es el cuento de nunca acabar. Salvo sus muy honrosas excepciones, hay madres solteras, por demás ejemplares.

La culpa del matrimonio
Parece mentira, pero los verdaderos enemigos de los hijos, son, en algunos casos, los mismos padres, estos arquitectos mal construyen los cimientos de la personalidad de los hijos, en principio, pelean todo el santo día por todo y por nada, establecen una pugna de poder, una guerra absurda de vanidades, siembran miedos con sus gritos y con sus nefastas actitudes, usan alcohol seguidamente, se intoxican con cigarro y otras drogas, a veces delante de los niños, son mentirosos e infieles, deshonestos, irresponsables, hacen de sus hijos unos verdaderos inútiles, tratan por culpa, de resolverles todo, algunas mamás hacen la tarea por ellos, son permisibles, apapachan por culpa, no predican con el ejemplo, enseñan al niño a ser merecedor, a no valorar, ni el techo, ni la comida, ni la educación, ni nada, los ricos, les regalan carros a sus hijos cuando cumplen 16 años.

ernestosalayandia@gmail.com

614 256 85 20, búscame en Facebook este jueves a las 6 de la tarde tiempo de Chihuahua, México, video conferencia.- El adicto nace o se hace?, escucha mi Podcatst en Spotty De Adicto a Adicto, gracias.

Ver nota completa...

Escríbe al autor

Escribe un comentario directo al autor

Suscríbete

Recibe en tu correo la información más relevante una vez al mes y las noticias más impactantes al momento.

Recibe solo las noticias más impactantes en el momento preciso.

¿El adicto nace o se hace?

Éste sitio web usa cookies con fines publicitarios, si permanece aquí acepta su uso. Puede leer más sobre el uso de cookies en nuestra política de uso de cookies.